La carga de nuestro móvil no va igual de rápido si se realiza con un puerto USB en el ordenador o con el cargador que solemos tener en casa y en el fondo la diferencia reside en la intensidad de la corriente que el cargador es capaz de ofrecer, así si cargamos con un cargador habitual de 500mA tardará el doble que si usamos uno de 1A.
Algunas empresas como Petalite especializadas en el diseño de sistemas de carga rápida de coches quieren lanzar baterías cuyo amperaje de salida sea de 12A para permitir cargar un móvil en unos 15 minutos al completo o MyUnu que prometen cargas en mucho menos tiempo con sus baterías con salida de corriente 2A (muy diferente a la que promete Petalite). En cualquier caso lo que se carga rápido es la batería no el móvil, que no está preparado a recibir tanta corriente.
Pero la revolución no tiene limites y la empresa Israelí StoreDot llega más lejos y promete poder cargar un móvil entero con hasta 3000mA de batería en máximo 30 segundos. ¿Aún pensáis que la autonomía será un problema en el futuro con estos avances tecnológicos?
Ahora debemos tener en cuenta la realidad: Los fabricantes preparan los móviles para cargar a una cierta intensidad y también incluyen baterías que podrían quemarse con altas intensidades de corriente. Por ello creo que no deberíamos comprar aún estos dispositivos, sino que los primeros interesados en incorporar estos avances deberían ser los propios fabricantes. La propuesta de StoreDOT pone de manifiesto que se debe modificar el terminal por lo que seguro que aún nos faltará al menos 2 años para ver estos avances.
En cualquier caso el futuro está claro: La carga del móvil sera un problema menos y se podrá hacer en menos de 30 segundos, tendremos cargadores más rápidos, baterías preparadas para ser cargadas a altas velocidades y terminales preparados para detectar dicha corriente y dedicarla a la carga del terminal.
